Según el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente, el mundo produce al año hasta 50 millones de toneladas de residuos electrónicos y eléctricos (e-waste), un peso superior al de todos los aviones comerciales fabricados hasta la fecha. El reciclaje es el proceso mediante el cual los desechos se convierten en nuevos productos o en recursos materiales con el que fabricar otros productos. De esta forma, los residuos se someten a un proceso de transformación eco-ambiental para poder ser aprovechados en algún proceso de fabricación, reduciendo el consumo de materias primas y ayudando a eliminar residuos.